“Usar un audífono me devolvió al mundo”
Roberto tuvo dos eventos en su vida que gatillaron un severo problema auditivo. Cuando tenía pocos meses de vida, fue tratado por una infección intestinal, con un medicamento que hoy está prohibido por generar sordera.
“Fue casi anecdótico. Mi madre no se dio cuenta de mi condición hasta que un día la llamaron por teléfono y (…) me dijo ‘ponme el teléfono’, yo le pregunté en cuál lado. Yo solo escuchaba por el izquierdo”, relata Roberto, quién asumió durante su infancia que solo era posible escuchar por un oído.
Rasmussen aprendió a vivir con su capacidad auditiva reducida, pero hace 15 años un virus en el vestíbulo afectó su oído sano. Fue en ese momento que decidió vencer los prejuicios asociados al uso de audífonos:
“Yo era muy joven para usar un audífono, pero fui a Audiomedical y debo reconocer que hubo un antes y un después de esa visita (…) Me puse el audífono y sentí que el mundo y las oportunidades nuevamente se me abrían, que los objetivos de vida volvían a florecer”.
Roberto reconoce que el equipo de Audiomedical ha forjado una relación cercana y de confianza con él, donde el horizonte está en apoyar a los pacientes y ayudarlos a alcanzar un nivel de vida cómodo y saludable.
“Ha sido mi aliado. Todo lo que he construido, sin Audiomedical y sin mi audífono, no sería posible. Ellos han entendido mi problema y han tenido las herramientas para solucionarlo”.
Y agrega que: “Mi mayor temor antes era, en el fondo, no poder relacionarme. Pero ahora siento que el audífono me devolvió al mundo. No hay edad para usar audífono. No se pierdan la vida, no se pierdan los momentos, no se pierdan las palabras”.